Cuando crecemos nos
damos cuenta que hasta esa única persona que se suponía que nunca nos iba a
fallar, seguramente lo va a hacer. Te van a romper el corazón, y vas a romper
el corazón de otros. Vas a pelear con tu mejor amigo o quizás hasta enamorarte
de él, y vas a llorar porque el tiempo se pasa volando. Así que saca demasiadas
fotos, reí demasiado, perdona libremente, y ama como si nunca hubieras sido
lastimado. La vida viene sin garantías, sin tiempos de espera, sin segundas
oportunidades. Sólo tenes que vivir la vida al máximo, decile a alguien cuánto
significa para vos, descarga tu bronca, habla claro, baila en la lluvia, agarra
a alguien de la mano, consola a un amigo, dormí mirando el amanecer, quedate
despierto hasta tarde, y sonreí hasta que la cara te duela. No tengas miedo a
las oportunidades, o a enamorarte, y sobretodo, viví el momento porque cada
segundo que pasas enojado o triste, es un segundo de felicidad que nunca vas a
poder recuperar.